Por otro lado el soporte forjado a mano en México que por si solo ya es una obra de arte. Para unir estos dos elementos un meridiano circular completo y graduado en metal con un giro de 360 grados, que evita tener que agacharse para ver el hemisferio sur.
El horizonte en madera y una pieza intermedia que puede alternarse entre hierro y madera para adecuar el globo al ambiente deseado.